Según la antroposofía, que estudia los procesos del alma, hacia los 9 años, nuestra alma nos revela información vital sobre nuestra misión… Todo este año vengo tratando de hacer memoria… ¿qué me trajeron mis 9 años? ¡Y conecteeeeeeeeeeeeeeeee!

Mi mama es psicóloga, y cuando yo era chica ella trabajaba en un orfanato. al mediodía la íbamos a buscar porque el lugar quedaba lejos… En el orfanato…todos los niños llamaban mamá a mi mamá. Mi papá quiso adoptar a un niño huérfano, pero por cercanía laboral, no se lo permitieron…Y yo, niña de 9 años me dije… «cuando sea grande yo voy a adoptar…»¡Y aquí estoy hoy!

Los arquetipos de crecimiento animan nuestros centros de poder. Nos conectan con una seguridad interna muy profunda. La de estar haciendo lo que tenemos que hacer.

Más integramos nuestros arquetipos, más alineadas a nuestra propia fuerza y nuestro propio poder personal. Los arquetipos de crecimiento nos dan fuerza, pasión, credibilidad y entrega.

Uno de mis arquetipos de crecimiento, que apoya mi llamado es:

La Madre

Es «La Madre» en mi la que me lleva a guiar el «SANANDO EL NIÑO INTERIOR».  Es el arquetipo que se activa en mí y resuena en otros.

Una de las chicas que estuvo este fin de semana conectaba con su propio “niño huérfano” (otro arquetipo, pero de defensa) «de niña nunca me gustaron mis padres, quería ser parte de otra familia, quería irme con otras mamás más piolas» ja. Se paso el encuentro diciendo… «Cris, si vivieras más cerca, viviría en tu casa…» ¡y me di cuenta!

¡Nuestro encuentro y conexión eran Arquetípicas! La Madre en mi conectando con su niña huérfana.

¡No te puedo explicar lo que significó darme cuenta de esto!  Estoy feliz, por mí y por los niños heridos y huérfanos que andan en ropas de adultos.

El niño herido, el niño huérfano, son expresiones arquetípicas que desarrollamos para sobrevivir. Somos mucho más que ello. 

Sana tu niño herido y dale voz a los arquetipos que apoyan a creSER

Conócete a ti mismo y conocerás el mundo

Si querés sanar tu niño herido, te acompaño con amorosidad, respeto y experiencia.