• Permitirse recibir ayuda. No hace falta encargarse de todo uno mismo.
  • Permitirse descansar. Para poder recuperarse de la a veces muy agotadora tarea de cuidar a un ser querido en su etapa final.
  • Permitirse sentir lo que se siente. No tengas miedo de mostrar tus sentimientos!
  • Permitirse estar triste.
  • Permitirse días libres, no los llenes de trabajo!
  • Permitirse soltar la rutina, cancelar compromisos innecesarios, dejar los «tengo que…»
  • Permitirse hablar de lo que se acaba de vivir..poder hablarlo nos ayuda a procesar y a aceptar.
  • Permitirse un mimo, un masaje, una sesión terapéutica que re armonice nuestra energía.
  • Si el duelo se extiende y estás listo para «seguir con tu vida», busca ayuda.
  • Toma flores de Bach.